Cuerpo y mente establecen un diálogo constante a lo largo del tiempo. Sólo supone una fuente de energía ernativa a los carbohidratos, sino que son necesarias para que multitud de procesos internos del organismo se desarrollen con normalidad. Bien hay opiniones encontradas respecto a la cantidad, numerosos especialistas coincidieron en que por la noche no es el mejor momento para incorporarlos.